Fin de semana... improvisado.

Recibí un mensaje de AA, anunciándome que en la Honorable Alcaldía Municipal, (HAM) había una presentación de Tango. La cita fue a las 8 de la noche en el patio de la Alcaldía, llegue como siempre en punto pero el show comenzó a hora Boliviana; 8:30 PM.

Estaba Ubaldo Nallar, conocido actor y director de teatro, como maestro de ceremonia, explicando sobre lo que denominé, la semana cultural Argentina en mi ciudad, creo que lleva otro nombre, pero buej… entonces una vez hecha la presentación, se dio paso a la lectura de unos poemas, que pudieron estar mejor declamados si el presentador se daba el tiempo de leerlos antes, en fin, eso no empaño para nada la función de Tango que disfrute al lado de mi amigo Curucusí Ocurrente, AA, M, una amiga y mi querido Juan de Mena.

Ver bailar tango tan de cerca y tan coordinado realmente alegro el corazón de los presentes. Al inicio fueron temas con un dejo de tristeza, pero a medida que cambiaba a otra canción, por ende otros poemas, cambiaba el ritmo llegando al momento climático los últimos 3 temas con un desborde de sensualidad entre el tango y la milonga.

Al terminar el show, fuimos a cenar, por ahí cerca de la plaza, para luego animarnos a salir a bolichear, ya que la noche aún era joven. Entre boliche y boliche, vimos conveniente ir a Pekos, 4 mujeres y 1 solo hombre (Curucusí Ocurrente).

Entre charlas de información a la amiga extranjera, salió un tema a flote que esta muy en boga en mi país… y trata de la famosa autonomía.

Por una parte, estaba la amiga M que defendía con buenos argumentos la autonomía de los pueblos indígenas, por otro lado Curucusí Ocurrente explicando que las autonomías no son malas y que debemos construir desde el espacio que nos toca desenvolvernos.

Argumentos van, argumentos vienen… casi me dormí, no por la aburrida charla pero… hay veces que necesitas dejar de lado eso para tener un espacio de distendimiento, me explico?

Bueno aquí mi humilde apreciación de los hechos… las autonomías son necesarias. Más no así, las que son liderizadas por un grupo de empresarios. No salgo a marchar por nada que no defienda mis intereses… como somos no más. Y es entendible que los empresarios se manifiesten porque están sus intereses en juego. Del millón de personas (que dicen) se aglomeraron hace un año a los pies del Cristo Redentor… todas sabían en realidad de que tipo de autonomía se esta hablando? Mucha gente fue sin tener conocimiento de causa.

Por otro lado, en manifestaciones de campesinos, muchos de ellos no sabían para que estaban marchando, uno les preguntaba y decían: “Preguntele al de adelante”
Entonces que tenemos?! Gente manejada por una tropa de vivos, tal cual. Ese jueguito se practica tanto en derecha como en izquierda.
Entre las conversaciones que tuvo mi querido Curucusí Ocurrente con M salto lo siguiente:

M: Pero son manejados por oligarquias cruceñas.
Curucusí: Antes de que existan las oligarquías cruceñas, estuvieron las oligarquías del occidente del país.
M: Aquí en Santa Cruz son muy racistas!!
Curucusí: Pero el racismo se ve en ambos lados, aquí y en el occidente.
M: Pero los pueblos originarios tienen una justificación histórica por 500 años de blablablabla

Creo si estamos como estamos, es porque tratamos de justificar nuestra intolerancia respondiendo y actuando con intolerancia.

Yo no estoy de acuerdo con apoyar a empresarios que son pocos, pero que manejan a muchos. Y tampoco creo estar de acuerdo con muchas medidas indigenistas, si bien tenemos a un presidente, eso no quiere decir que vayamos a solucionar ahora los problemas de 500 años atrás, considero que TODOS somos prioridad.

Pero bueno, como dije en algún momento, nosotros desde el espacio en el que nos desenvolvemos debemos aportar con nuestro grano de arena por hacer desaparecer esa intolerancia y racismo que se vive a diario en nuestra ciudad y el resto de las ciudades de este país. Y me alegra saber que hay jóvenes como es el caso de Curucusí Ocurrente, que desde su lugar de trabajo, creo un guión para una propaganda, que lleva como título “La Bolivia que queremos”, para tomar en cuenta, muy al margen de saber quien financia este audiovisual… porque lo que vale es el concepto y las buenas intenciones.